Cuando hablamos de comunicación, a menudo pensamos en palabras, gestos claros o incluso expresiones escritas. Sin embargo, hay una forma de comunicación que escapa a estos métodos tradicionales y que es esencial en el desarrollo infantil, especialmente en niños con alteraciones del desarrollo: la comunicación no convencional. Este artículo profundiza en qué es la comunicación no convencional, explorando sus diversos subniveles y cómo se manifiestan en la vida diaria de aquellos que la utilizan.
Contenidos de este artículo:
¿Qué es la Comunicación No Convencional?
La comunicación no convencional se refiere a las formas de interacción que no implican el uso de palabras habladas o signos estándar de lenguaje. En niños con alteraciones del desarrollo, como en el espectro autista, estas formas de comunicación son fundamentales para expresar deseos, necesidades y emociones. Este nivel de comunicación incluye una variedad de comportamientos que, aunque a menudo no son inmediatamente claros para todos, son intencionales y significativos para quien los emite y para quienes están familiarizados con ellos.
Subniveles de la Comunicación No Convencional
En el ámbito del desarrollo infantil, especialmente en niños con alteraciones del desarrollo, la comunicación no convencional se presenta como una ventana vital hacia sus pensamientos, emociones y necesidades. Este tipo de comunicación engloba una serie de comportamientos que, aunque carecen de las formas tradicionales del lenguaje hablado o gestual reconocido, cumplen una función comunicativa crítica. Estos comportamientos son intencionales y están diseñados para influir en el entorno del niño de maneras específicas. Para comprender mejor cómo los niños utilizan la comunicación no convencional, es esencial explorar sus subniveles, desde expresar rechazo hasta solicitar más interacción o actividad.
1. Se Niega – Rechaza
Este subnivel implica la capacidad del niño para expresar desacuerdo o desaprobación. Puede manifestarse a través de apartar la cabeza, empujar un objeto o una persona, o mediante expresiones faciales de disgusto. Estas acciones, aunque no verbales, son comunicaciones intencionales claras de sus preferencias.
El primer subnivel de la comunicación no convencional, «Se Niega – Rechaza», es crucial en el desarrollo de la autonomía y la autoafirmación del niño. Este comportamiento permite al niño establecer límites y expresar su desagrado o incomodidad con situaciones, objetos o acciones específicas. Desde un punto de vista evolutivo y de desarrollo, esta capacidad de rechazo es fundamental, pues marca el inicio de la capacidad del niño para tomar decisiones independientes y protegerse de experiencias no deseadas o potencialmente dañinas.
Desde el punto de vista del desarrollo del lenguaje, aunque este subnivel puede manifestarse sin palabras, prepara el terreno para el uso futuro del lenguaje como herramienta de negación y preferencia. Por ejemplo, un niño pequeño puede inicialmente empujar un plato de comida que no desea comer; más adelante, este comportamiento puede evolucionar hacia el uso de palabras como «no» o «no quiero».
2. Solicita Más Acción
Un niño puede indicar el deseo de que una actividad continúe. Esto puede hacerse repitiendo una acción que antes provocó esa actividad, o llevando la mano de un adulto hacia la actividad deseada nuevamente.
El subnivel «Solicita Más Acción» es igualmente significativo, ya que demuestra el deseo del niño de prolongar una experiencia que encuentra placentera o beneficiosa. Este comportamiento refleja un entendimiento emergente del niño sobre la relación causa-efecto y su capacidad para manipular su entorno para satisfacer sus deseos. Por ejemplo, un niño puede repetidamente activar un juguete musical que le gusta para que continúe sonando, o puede traer a un adulto su libro favorito para que le siga leyendo.
Este subnivel no solo es importante para el desarrollo cognitivo, al fomentar la comprensión de cómo sus acciones pueden afectar el mundo, sino que también es crucial para el desarrollo del lenguaje. A medida que el niño crece, la acción de solicitar más actividad puede comenzar a acompañarse de gestos y eventualmente de palabras o frases que indiquen su deseo de continuar con una actividad, como decir «más» o «otra vez». Este uso del lenguaje para influir en el entorno es un componente esencial del desarrollo comunicativo.
3. Solicita Una Nueva Acción
Este comportamiento muestra el deseo de iniciar una actividad diferente. El niño puede llevar a un adulto hacia un nuevo juego o hacia un objeto que desee utilizar en ese momento.
Este subnivel implica la capacidad del niño para iniciar o solicitar el comienzo de una actividad diferente, lo que indica una comprensión avanzada de cómo sus acciones pueden influir en su entorno. Este comportamiento es significativo desde varias perspectivas:
- Desarrollo Cognitivo: Solicitar una nueva acción muestra que el niño no solo reacciona al mundo que lo rodea sino que busca activamente participar y modificar su entorno según sus intereses o curiosidad. Este es un indicativo de habilidades cognitivas como la iniciativa, la planificación y el razonamiento.
- Desarrollo del Lenguaje: Aunque la comunicación puede ser no convencional, la intención de iniciar una nueva acción prepara el camino para el uso de comandos y solicitudes verbales. Por ejemplo, un niño que lleva a un adulto hacia un tobogán en un parque está expresando su deseo de jugar allí, una acción que eventualmente podría traducirse en frases como «quiero ir al tobogán».
4. Solicita Más Objeto
Cuando un niño disfruta de un objeto y desea más de este, puede señalar hacia donde se guarda el objeto o mirar repetidamente hacia él y hacia el cuidador, intentando comunicar su deseo de obtener más.
Solicitar más objetos refleja la capacidad del niño para indicar que desea más de un objeto específico, lo cual es fundamental para su desarrollo emocional y social:
- Desarrollo Cognitivo y de Autonomía: Este comportamiento muestra una clara relación entre causa y efecto, donde el niño entiende que ciertas acciones, como señalar o hacer gestos hacia un objeto, pueden resultar en la obtención de más de ese objeto. Es un reflejo de la autonomía emergente y la habilidad para satisfacer sus propias necesidades.
- Desarrollo del Lenguaje: Al igual que con la solicitud de una nueva acción, pedir más de un objeto establece las bases para el desarrollo del lenguaje. Los niños que inicialmente hacen gestos para indicar «más» eventualmente pueden comenzar a verbalizar sus deseos, utilizando palabras o frases para expresar la cantidad deseada.
5. Toma Decisiones
Este subnivel se refiere a la elección entre opciones, donde el niño puede señalar o mirar significativamente hacia su preferencia, mostrando así su capacidad para tomar decisiones.
El subnivel «Toma Decisiones» refleja un avance significativo en la capacidad cognitiva y emocional del niño. Este comportamiento implica la selección consciente entre dos o más opciones, demostrando una comprensión de las preferencias personales y la autonomía en sus interacciones:
- Desarrollo Cognitivo: La capacidad de tomar decisiones indica un desarrollo avanzado de la función ejecutiva. Implica evaluar opciones, considerar posibles resultados y hacer una elección basada en el análisis personal. Este proceso es crucial para el desarrollo del pensamiento crítico y la resolución independiente de problemas.
- Desarrollo Social: Al tomar decisiones, especialmente en entornos sociales, el niño aprende a negociar, a compartir y a participar en el intercambio social. Estas habilidades son fundamentales para las relaciones interpersonales y la integración social efectiva.
- Desarrollo del Lenguaje: Aunque inicialmente la decisión puede manifestarse a través de señales no verbales, con el tiempo, este comportamiento fomenta el uso de lenguaje específico relacionado con la elección y la preferencia, como «quiero esto» o «prefiero aquello», enriqueciendo su capacidad de comunicación verbal.
6. Solicita Nuevo Objeto
Similar a solicitar más de un objeto, pero en este caso, el niño busca obtener algo completamente diferente, indicándolo a través de gestos o llevando a alguien hacia el objeto deseado.
Este subnivel de solicitar nuevos objetos es crucial para entender cómo los niños interactúan con su entorno para satisfacer la curiosidad y el deseo de exploración:
- Desarrollo Cognitivo: Este comportamiento muestra una habilidad para identificar y buscar activamente nuevos estímulos o recursos que despiertan el interés del niño. Esto no solo implica reconocimiento y deseo, sino también la iniciativa y la habilidad para actuar con el fin de obtener ese nuevo objeto.
- Desarrollo Social: Al solicitar nuevos objetos, los niños a menudo deben interactuar con otros, ya sea pidiendo ayuda para alcanzar algo o para participar en una actividad nueva. Esto fortalece sus habilidades sociales y les enseña cómo sus acciones pueden afectar a los demás y cómo trabajar con otros para alcanzar objetivos comunes.
- Desarrollo del Lenguaje: Similar a otros subniveles, la capacidad de solicitar nuevos objetos inicialmente puede ser no verbal, pero eventualmente promueve el uso del lenguaje como una herramienta para expresar deseos específicos y negociar la obtención de esos deseos.
7. Solicita Atención
Los niños pueden buscar captar la atención de alguien a través de sonidos, movimientos o tocando a la persona directamente, comunicando la necesidad de interacción o asistencia.
El comportamiento de solicitar atención es fundamental en el desarrollo social y emocional del niño. A través de este comportamiento, los niños aprenden a interactuar con otros y a entender la dinámica de las relaciones sociales:
- Desarrollo Cognitivo: Solicitar atención implica un entendimiento de que otras personas pueden ser influencias y recursos en el cumplimiento de necesidades y deseos. Este comportamiento demuestra una habilidad para reconocer la presencia y las posibles acciones de otros, un paso crucial en el desarrollo de la teoría de la mente, es decir, la capacidad para entender los estados mentales propios y ajenos.
- Desarrollo Social: A través de solicitar atención, los niños no solo interactúan sino que también fortalecen sus habilidades de comunicación y aprenden a formar y mantener relaciones. Este comportamiento les ayuda a comprender cuándo y cómo pueden captar la atención de otros de manera efectiva y apropiada, lo cual es esencial para la integración social exitosa.
- Desarrollo del Lenguaje: Inicialmente, el acto de solicitar atención puede ser no verbal, como hacer ruido o tocar a alguien, pero eventualmente, este comportamiento promueve el desarrollo del lenguaje a medida que el niño comienza a usar palabras y frases para captar y mantener la atención de los demás.
8. Muestra Afecto
La comunicación no convencional también incluye la expresión de emociones, como el afecto, que puede manifestarse a través de abrazos, caricias o simplemente un acercamiento físico tranquilo.
Mostrar afecto es un indicador clave del desarrollo emocional del niño y su capacidad para formar conexiones afectivas con los demás:
- Desarrollo Emocional: Este comportamiento es vital para el establecimiento de lazos afectivos y para el desarrollo de la empatía. Mostrar afecto, como abrazar, sonreír o hacer caricias, son formas en que los niños expresan amor y gratitud, fortaleciendo las relaciones afectivas con padres, cuidadores y pares.
- Desarrollo Social: Al mostrar afecto, los niños no solo expresan sus emociones sino que también aprenden las normas sociales relacionadas con la expresión emocional. Aprender cuándo y cómo mostrar afecto de manera apropiada es esencial para la adaptación social y la formación de relaciones interpersonales saludables.
- Desarrollo del Lenguaje: Aunque mostrar afecto puede ser inicialmente un acto no verbal, con el tiempo puede incluir el uso de lenguaje afectivo, como decir «te quiero» o «me gustas». Estas expresiones lingüísticas de afecto son importantes para el desarrollo del lenguaje emocional y social.
Impacto en el Desarrollo
Entender y responder adecuadamente a la comunicación no convencional es vital para el desarrollo emocional, social y cognitivo de los niños, especialmente aquellos con dificultades de desarrollo. Facilita una mejor integración social y fortalece la relación entre el niño y sus cuidadores o educadores.
La comunicación no convencional desempeña un papel fundamental en el desarrollo y la evaluación evolutiva de los niños, especialmente aquellos con alteraciones del desarrollo. Aunque esta forma de comunicación puede no seguir los patrones convencionales del lenguaje hablado o de los signos reconocidos, es crucial para entender cómo los niños perciben y se relacionan con su mundo. Veamos cómo la comunicación no convencional influye en el desarrollo integral del niño y su importancia en la evaluación evolutiva.
Importancia la Comunicación No Convencional en el Desarrollo
Desarrollo Cognitivo
La comunicación no convencional es indicativa de cómo los niños procesan la información y responden a su entorno antes de desarrollar o en ausencia de habilidades de comunicación convencional. Este tipo de comunicación incluye gestos, expresiones faciales, y otros comportamientos que aunque no son verbales, transmiten intenciones, deseos y emociones. Estos indicadores ayudan a los niños a interactuar con su entorno de manera efectiva, fomentando el desarrollo de habilidades cognitivas complejas como la causa y efecto, la solución de problemas y la toma de decisiones.
Desarrollo Social y Emocional
La comunicación no convencional es también vital para el desarrollo social y emocional. A través de estos comportamientos, los niños aprenden a expresar sus necesidades y emociones, y a interpretar las respuestas de otros, lo cual es esencial para la formación de relaciones interpersonales saludables y la adaptación social. Además, estos comportamientos facilitan el desarrollo de la empatía y la comprensión, al permitir a los niños conectar emocionalmente con otros sin el uso del lenguaje estructurado.
Desarrollo del Lenguaje
Aunque no convencional, esta forma de comunicación establece las bases para el desarrollo del lenguaje. Los precursores del lenguaje, como el contacto visual, la imitación y la respuesta a gestos, son componentes esenciales de la comunicación no convencional que ayudan a los niños a entender la estructura y la función del lenguaje antes de que desarrollen la capacidad de hablar.
Importancia en la Evaluación Evolutiva
Evaluación de Necesidades y Habilidades
La comunicación no convencional es un componente crítico en la evaluación evolutiva, especialmente en niños con alteraciones del desarrollo. Estos comportamientos proporcionan información valiosa sobre el nivel de desarrollo del niño y sus capacidades comunicativas. Por ejemplo, la capacidad de un niño para solicitar atención o mostrar afecto a través de medios no convencionales puede indicar niveles de comprensión y habilidad social que no serían evidentes solo a través de la observación de la comunicación verbal.
Identificación de Dificultades
La observación de la comunicación no convencional permite a los educadores y terapeutas identificar posibles Dificultades en el desarrollo del niño. Estos comportamientos pueden ser indicativos de áreas donde el niño podría necesitar apoyo adicional, como en el desarrollo del lenguaje, las habilidades sociales o la regulación emocional.
Planificación de Intervenciones
La evaluación de la comunicación no convencional es esencial para planificar intervenciones adecuadas y personalizadas. Comprender cómo un niño se comunica dentro de este marco permite a los profesionales diseñar estrategias de enseñanza y terapia que aprovechen sus fortalezas y aborden sus áreas de necesidad.
Si estás observando formas de comunicación no convencionales en un niño y deseas entender mejor estos comportamientos o necesitas apoyo para responder adecuadamente, podemos ayudarte. En nuestro centro, ofrecemos evaluaciones especializadas y estrategias de intervención diseñadas para niños con alteraciones del desarrollo. Contacta con nosotros para descubrir cómo podemos apoyar el desarrollo comunicativo de tu hijo y facilitar su interacción efectiva con el mundo que le rodea.